Las válvulas de expansión electrónicas son sin duda más ventajosas que las válvulas de expansión termostáticas tradicionales. Permitiendo ganancias comprobadas en el consumo de energía, ayudando así a combatir el desperdicio de recursos naturales, favorecen la simplicidad y precisión de ajuste en el campo, facilitando el trabajo del técnico en el campo. Sin duda, se requiere una mayor inversión inicial, pero el retorno, según los expertos entrevistados, es inconmensurablemente mayor. ¿Por qué, entonces, aún existe cierta resistencia por parte de los más beneficiados por los impactos positivos?

Pero, vayamos a los diferenciales de la válvula de expansión electrónica. “Entre otras, podemos mencionar tres diferencias principales entre las válvulas de expansión electrónicas y las válvulas de expansión termostáticas. Las válvulas de expansión electrónicas permiten un ahorro energético efectivo en nuestros sistemas de refrigeración, es decir, permiten proveer el mismo “frío” utilizando menos energía. Esto no solo reduce su factura de energía, sino que también ayuda al medio ambiente y al planeta. Su ajuste también es mucho más conveniente y preciso para el técnico en refrigeración, permitiéndole hacerlo directamente en el panel de un controlador electrónico en lugar de tener que ajustar físicamente una válvula de expansión termostática dentro del ambiente refrigerado, a menudo en un lugar de difícil acceso y alturas considerables. Un tercer aspecto es su control más preciso del sobrecalentamiento y su rango de trabajo más amplio, lo que resulta en un tiempo de enfriamiento más corto, el llamado pull-down”, explica Luiz Villaça, de ingeniería de aplicaciones de Rac Brasil.

Fabiano Damião, consultor técnico para productos de ingeniería de aplicación de Full Gauge Controls, empresa que tiene en su portafolio la línea Valex, compuesta por dos modelos de driver para el control de válvulas de expansión electrónicas, concluye: “Las válvulas de expansión electrónicas se utilizan de forma segura y confiable en entornos de de equipos de alta eficiencia, prolongando la vida de los compresores en refrigeración de alimentos, bombas de calor o sistemas de aire acondicionado. Su gran desempeño en el ahorro de energía eléctrica, además de su fácil instalación y configuración, son sus grandes diferenciales frente a las arcaicas válvulas termostáticas que todavía encontramos.”

¿Cuál es el cambio fundamental de una válvula termostática a una electrónica? Villaça utiliza la imagen de un automóvil para explicar la transición tecnológica. “Cambiar de válvulas de expansión termostáticas a válvulas de expansión electrónicas en los sistemas de enfriamiento es el equivalente a cambiar de carburadores a inyección electrónica de combustible en automóviles. Es una transición del control mecánico analógico al control electrónico digital, con los consiguientes beneficios que todos percibimos a diario. Y esto abre una gran vía en la refrigeración para su integración con otros dispositivos digitales de control, automatización y monitorización, ya sean locales o remotos, centralizados o vía internet. Y con las reducciones de costos que se han venido produciendo, estos beneficios llegarán incluso a instalaciones más pequeñas, como fue el caso de la inyección electrónica, que llegó a los autos populares” Utilizando la línea que ofrece su empresa para establecer las ventajas y comparativas, el ingeniero de Full Gauge Controls destaca los “instrumentos compactos e integrados que ofrecen una solución completa y totalmente configurable para el control de varios modelos de válvulas de expansión electrónicas, además del control de sobrecalentamiento, temperatura ambiente, deshielos, presión, ventilación, iluminación y alarmas. Es decir, nuestros productos sustituyen al controlador o termostato de la instalación, ya que controla los procesos de refrigeración, además del caudal de líquido.”

Damião también explica que la línea incorpora, dentro de la unidad, el ultracap, un dispositivo de seguridad interno que no requiere el uso de un solenoide en caso de falla de energía, cerrando el cuerpo de la VEE. “Los instrumentos de la línea Valex también reciben información del transductor de presión y realizan la recolección de pump down, sin necesidad de un presostato mecánico para este procedimiento, todo a través de una programación configurada por el usuario técnico. La posibilidad de gestión y monitoreo a través del software Sitrad Pro también es otro punto que destacamos. De esta forma, es posible controlar remotamente las instalaciones, cambiar parámetros, generar informes y mucho más, todo a través de internet.

Después de todos los argumentos, es difícil entender por qué los técnicos y especialistas del sector no se adhieren en masa a la válvula de expansión electrónica. “En los últimos años, las válvulas de expansión electrónica han ido ganando mercado, ya que los técnicos del área están reconociendo sus ventajas, como la facilidad de instalación y programación, además de contribuir a la eficiencia energética y la sustentabilidad. Nuestro principal desafío es vender la idea de que adquirir un producto de la línea Valex de Full Gauge Controls es una inversión que se amortiza en meses. Y estamos teniendo mucho éxito en esta misión”, completa Damião.